domingo, 26 de julio de 2009

No, pero sí


-¿Qué tal con el chico de ayer? ¿Lo hicistéis o no?
-No, él me propuso ir a su casa, pero le dije que no me iba con nadie la primera noche.
-Ah, ¿y a él qué le pareció eso?
-Eso es lo peor. Me dijo que no lo entendía del todo, pero que lo respetaba. ¿Te lo puedes creer? Me dice: no lo comparto, pero cada uno tiene sus principios. Me dio un beso y se marchó.
-Lo dices con cierta indignación.
-Claro, ¿tú ves normal que ni siquiera insistiera un poco?
-Entonces sí que querías irte con él.
-Sí, si me moría de ganas.
-Pues habérselo dicho.
-Ya, ¿y qué iba a pensar de mí?
-Coño, pues que tenías ganas de follar con él. ¿Qué iba a pensar?
-No quería que me tomase por una 'de esas'.
-¿Te refieres a una de esas para las que lo que dicen, lo que hacen y lo que les apetece hacer es una misma cosa?
-Tú ya sabes a qué me refiero.
-¿A que las que se acuestan con un tío la primera noche son unas zorras?
-Si yo no pienso eso, pero la gente sí. La presión social es muy fuerte, tú lo sabes.
-Aclárame algo: dices que tú no lo piensas, pero estás convencida de que la gente sí, y de que te van a juzgar por ello, pero ¿quién en concreto? ¿El tío que se fue a casa solo simplemente porque tú se lo pediste? ¿Y qué crees que iría pensando por el camino?
-Seguramente que soy una estrecha, o algo así.
-Así que entre golfa y estrecha prefieres que te tilden de lo segundo. Es bastante revelador, la verdad.
-No sé si pensaba eso, pero en todo caso si así fuera eso demuestra que es un capullo y que no valía la pena. Además, la cuestión es que ni siquiera intentó convencerme. No me pareció que tuviera mucho interés, y eso sí que me molesta.
-No, cielo, no, lo que te molesta es que tú también te fuiste a cama con el calentón.

No hay comentarios: